Preocupa la cifra de suicidios en Córdoba

Estadísticas y los factores causales

No se habla públicamente del tema. Son pocos los estudios que existen y muchas menos las acciones para prevenirlo. Pero el suicidio convive en la sociedad. Y así, oculto para la mayoría, cada año se cobra la vida de unos tres mil argentinos y más de 200 cordobeses

En este marco, el Centro de Investigación Ricardo Núñez, del Poder Judicial de Córdoba, realiza un estudio inédito sobre las estadísticas y los factores causales de suicidios en la provincia, con el objetivo de mejorar la prevención.

“Argentina ocupa el primer lugar en el número de suicidios en América latina en general y de adolescentes en particular, por lo que configura un grave problema de salud pública, infiriéndose por ello la necesidad de datos estadísticos en la ciudad de Córdoba para favorecer la toma de decisiones en cuanto a la prevención”, se lee en la investigación.

Los primeros datos dan cuenta de que sólo en la ciudad de Córdoba se suicidaron 94 personas en 2009. Hubo un marcado ascenso en los últimos años: en 2005, fueron 62; en 2006, 69; en 2007, 79; en 2008, 86.

Sin embargo, a nivel provincial, la cifras son más o menos estables, según los datos del Ministerio de Salud de la Nación. Así, en 2009 se registraron 242 suicidios; en 2008 hubo 263 muertes, la cifra más alta desde 2001. En el resto del período 2001-2009, el resultado se mantuvo entre 232 y 257 fallecimientos por año. También se mantiene estable la cifra nacional.

Perfil. Los datos del Centro Ricardo Núñez sobre los suicidios en la ciudad de Córdoba confirman la tendencia nacional: la mayoría fueron varones (63 por ciento), y la incidencia más alta se dio en el grupo etario de ancianos, seguido por el de 21 a 25 años.

En cuanto al nivel de instrucción, los grupos más importantes se ubicaron en el siguiente orden: primaria completa (32 por ciento), secundaria incompleta (21) y secundaria completa (21).

Además, en relación con el estado civil, hubo mayor cantidad de solteros (51 por ciento), seguidos del grupo de casados (29). Mientras que sobre la condición laboral, la mitad de la población correspondió al grupo con empleo, seguido por el de desocupados (17 por ciento) y jubilados (11).

Hablar de eso. “Me parece oportuno y eficaz hablar del tema. En varias oportunidades defendí la postura de la no publicación para no contagiar ideas suicidas. Defendí el silencio en los medios para no apologizar. Y me hice cómplice de la clandestinidad del tema, volviéndolo más tabú”, asegura el psiquiatra Juan Carlos Lostaló.

Agrega: “En la equivocación, aprendí que lo que empezamos a hablar y comunicar, nos va haciendo perder el miedo. Del suicidio sí se habla, el silencio y el miedo nos enferman. Esto se puede curar. ¿Haciendo qué y cómo? Preguntando, desde qué tenés y qué te pasa hasta poner una oreja y escuchar al otro”.

Los primeros datos estadísticos de la investigación del Centro Ricardo Núñez son un paso esencial para comenzar a hablar del tema y buscar soluciones.

En una segunda etapa, el mismo grupo de investigación –dirigido por Alfonso Piccardi y Ricardo Rosemberg– incluirá datos de toda la provincia y aplicará la “autopsia psicológica”. Ésta es una técnica que intenta reconstruir las circunstancias de la muerte y examinar los eventos de la vida del fallecido inmediatamente antes de su deceso.

Según el estudio, la importancia de la técnica no es menor: permite identificar posibles factores de riesgo cuyo conocimiento es esencial para diseñar estrategias de prevención adecuadas para una región particular.

Prevención y consejos

Consejos del Centro de Asistencia al Suicida de Buenos Aires (www.casbuenosaires.org.ar):

Preaviso. La idea de que si alguien habla de suicidarse no lo hará, es falsa. Se debe tomar en serio.

Transitorio. La mayoría de los suicidas están indecisos entre vivir o morir. Si se les da la ayuda adecuada, pueden vivir sus vidas de forma placentera.

Señales. Amenazas de suicidio o referencias reiteradas a la muerte; la presencia, dentro de un cuadro de sufrimiento, de insomnio, retraimiento, pérdida del impulso sexual o cambios en el carácter.

Consultar. En presencia de cualquiera de estas señales, recurrir a un experto.

Teléfono. El 135 (ciudad de Córdoba) o (0351) 426-5755 (Centro de Asistencia al Suicida de Córdoba). E-mail: asistenciaalsuicidacba@hotmail.com

 

La Voz del Interior

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