Andrés Soto ( 2 hs 16 min) es el ganador de la Revancha a Pintos.
La fiesta en la capital del Mountail Bike
Cobertura especial Canal 11 La Cumbre. 1500 ciclistas recorrieron 73 km entre San Marcos Sierras-La Cumbre El ganador de esta fecha fue el participante de la categoría Élite Andrés Catriel Soto de Colón con 2 horas 16 minutos y 51 segundos
Hoy la Revancha al Valle del Río Pinto, digna sucesora en el mountain bike del Desafío disputado en mayo de este año y que reunió a 4.800 ciclistas, brindó con sus 1.500 participantes otro estallido de color y esfuerzo entre San Marcos Sierras (inicio de la prueba) y esta localidad serrana.
Los 73 kilómetros de recorrido, que tuvieron como ganador al participante de Élite Andrés Catriel Soto de Colón con 2 horas 16 minutos y 51 segundos, exhibió tanto un agreste terreno como la magnificencia de una naturaleza serrana incomparable.
Se necesitó muy buen estado físico, la organización impecable que se reiteró del Club Amigos del Deporte y garra a toda prueba para atravesar vados, cuestas interminables, transitando un camino plagado de piedras y dificultades a cada paso.
Pareciera que esta revancha cumbrense, al igual que el desafío, crecen año tras año sin techo a la vista. El secreto sin dudas es que la región exhibe una topografía que atrae a los cultores del mountain bike, justamente por las características mencionadas. Un ámbito para audaces, al parecer sin diferencias de sexo, y menos límites cronológicos.
Y, al igual que siempre, tanto el punto de largada como el de arribo se convirtieron en una romería familiar y de amigos, que brindaron su aliento a los corredores volviendo a apostar a un deporte con mucha adrenalina y buenas piernas.
Los 73 kilómetros de recorrido, que tuvieron como ganador al participante de Élite Andrés Catriel Soto de Colón con 2 horas 16 minutos y 51 segundos, exhibió tanto un agreste terreno como la magnificencia de una naturaleza serrana incomparable.
Se necesitó muy buen estado físico, la organización impecable que se reiteró del Club Amigos del Deporte y garra a toda prueba para atravesar vados, cuestas interminables, transitando un camino plagado de piedras y dificultades a cada paso.
Pareciera que esta revancha cumbrense, al igual que el desafío, crecen año tras año sin techo a la vista. El secreto sin dudas es que la región exhibe una topografía que atrae a los cultores del mountain bike, justamente por las características mencionadas. Un ámbito para audaces, al parecer sin diferencias de sexo, y menos límites cronológicos.
Y, al igual que siempre, tanto el punto de largada como el de arribo se convirtieron en una romería familiar y de amigos, que brindaron su aliento a los corredores volviendo a apostar a un deporte con mucha adrenalina y buenas piernas.
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